El golpe de calor

A todos nos gusta estar al aire libre en verano. Pero los días calurosos y soleados pueden representar una amenaza para los niños pequeños y los adultos de mayor edad.

El cuerpo humano tiene la notable capacidad de regular su propia temperatura aun cuando el calor del ambiente sea extremo: ¡hasta los 50°C ! Esto lo logra por diferentes mecanismos, como la sudoración y el metabolismo, bajo el control de una zona en la base de nuestro cerebro, el hipotálamo. Es decir, que un adulto joven, puede permanecer un tiempo razonable al aire libre un día de calor extremo sin variar su temperatura corporal a más de 36,6 – 37°C.

Pero estos mecanismos no están bien desarrollados en los bebés y no son tan eficientes después de los 60 años.  El golpe de calor y el agotamiento son el resultado de esta falla en la regulación de la temperatura cuando un adulto mayor está expuesto al calor del verano sin tomar recaudos. A pesar de que ambos son prevenibles, todos los veranos se producen muertes de bebés o adultos mayores por golpe de calor o deshidratación.

 

¿Qué es el golpe de calor y el agotamiento por calor?

 

El golpe de calor ocurre cuando la temperatura interna del cuerpo aumenta a más de 42°C y se vuelve incontrolable. En este escenario, un adulto mayor a menudo no puede producir sudor, que sirve para enfriar el cuerpo. Esta es una condición muy grave, especialmente cuando la temperatura se eleva a más de 40°C en menos de 15 minutos. Aunque el día no sea tan caluroso, si hay humedad puede sentirse mucho peor.

Los ambientes más frecuentes donde ocurren los golpes de calor son en los hogares donde no hay buena ventilación ni acondicionadores de aire, las zonas de trabajo al aire libre, como los trabajos de jardinería y los automóviles.

El golpe de calor es una condición grave para un adulto mayor que se desarrolla en unos minutos. El agotamiento por calor tiene una evolución más lenta y puede ocurrir después de sufrir el calor por 2 o 3 días o no hidratarse adecuadamente.

 

Síntomas del golpe de calor:

 

Las señales de alarma para concurrir o llamar a emergencias son:

  • Temperatura corporal mayor de 39°C que aumentó en pocos minutos
  • Pulso fuerte y rápido (taquicardia)
  • Respiración rápida
  • Mareo
  • Náuseas
  • Falta de sudor, piel seca, roja o caliente
  • Dolor de cabeza
  • Debilidad
  • Confusión, cambio de estado de ánimo como agresividad o desorientación.
  • Pérdida de conciencia (desmayo)

Mientras llega el servicio de emergencia, lleva a la persona a un lugar más fresco, trata de bajar la temperatura del cuerpo con un baño de agua fría o ropas más livianas. NO le dé nada de beber.

 

Síntomas del agotamiento por calor:

 

  • Sudoración intensa
  • Palidez
  • Calambres musculares
  • Cansancio, debilidad
  • Mareos
  • Dolor de cabeza
  • Náuseas, vómitos
  • Pulso rápido pero débil
  • La piel puede estar fresca y húmeda
  • Respiración rápida y superficial
  • Desmayo

Para enfriar el cuerpo puede llevar al adulto mayor a un baño frío, darle bebidas frescas (nunca alcohólicas), buscar un ambiente con aire acondicionado, usar ropa ligera. Si el estado no mejora en una hora o si sube la temperatura corporal, lleve a la persona al médico.

 

Los adultos mayores sufren más el calor:

 

Como mencionamos, los mayores de 60 años son más susceptibles a sufrir un golpe de calor, agotamiento o deshidratación en el verano. Otras personas que también corren más riesgos son:

  • Personas con discapacidades motoras o quienes no pueden expresar que sienten mucho calor
  • Personas con obesidad o problemas cardiovasculares
  • Niños pequeños
  • Trabajadores al aire libre
  • Personas en áreas urbanas
  • Adultos mayores viajando en auto
  • Personas con piel bronceada (la piel elimina el calor más lentamente)
  • Personas haciendo ejercicio en ambientes calurosos
  • Algunos medicamentos (ansiolíticos, sedantes o antialérgicos) pueden afectar la capacidad para regular la temperatura. En este caso es necesario consultar a su médico para tomar medidas preventivas.
  • Las dietas restringidas en sal también dificultan la regulación del calor corporal. Consulte a su médico si puede tomar alguna bebida con minerales en verano para compensar.
  • El alcohol produce una deshidratación rápida y severa, por lo que no se aconseja tomar bebidas alcohólicas para aliviar el calor.

 

Prevención del golpe de calor:

 

  • Los días de calor intenso no se exponga al sol ni permanezca al aire libre mucho tiempo.
  • Si tiene que realizar actividad al aire libre, limítelas al mínimo, en la mañana temprano o después de las 17 hs, siempre usando protector solar de rayos UV.
  • Manténgase hidratado con agua o jugos naturales, evite bebidas con azúcar, café o alcohol.
  • Manténgase en ambientes con aire acondicionado o sistemas de ventilación en las horas más calurosas, tanto tiempo como sea posible.
  • Use ropa fresca, liviana, suelta y de colores claros, para que no absorba los rayos solares y permita que su cuerpo transpire.
  • Infórmese sobre la sensación térmica del día y los venideros. Cuando escuche el informe del clima, tenga en cuenta ese número porque indica cuánto calor realmente se siente, generalmente influye la humedad ambiente.
  • Cuidado con los ventiladores: la corriente de aire hace pensar que el ambiente refresca, pero en realidad el aire caliente puede estar simplemente circulando sin bajar la temperatura.
  • Si no dispone de aire acondicionado recuerde que los espacios públicos como bibliotecas, cafés, bares o la casa de un amigo son buenas opciones para estar unas horas en un ambiente más fresco y bajar el riesgo de golpe de calor.

Fuentes:

Regulación de temperatura del cuerpo humano.

Daily Caring

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