Aunque las personas adultas que tienen padres mayores suelen preocuparse por el futuro de sus seres queridos, muy pocas veces están dispuestos a tener una conversación franca con ellos sobre este tema.
El costo financiero que significa mantener a los padres como adultos mayores dependientes de cuidados médicos o de acompañamiento profesional es lo que más desvela a sus hijos. Teniendo en cuenta que se espera que cerca del 2050 la población de adultos mayores en los países desarrollados sea la mitad de la población total, estar listos económicamente para ese momento parece ser un factor muy importante.
En estos países, 1 de cada 4 adultos mayores recibe ayuda económica de sus hijos, aunque la mayoría de éstos no han discutido nunca con ellos ni con el resto de la familia sobre cuánto es el dinero involucrado ni quién está pagando las cuentas. Aunque los planes de obras sociales, de retiro o del gobierno cubren muchos de los gastos de atención en la tercera edad, estar preparado para cuando ese momento llegue es la mejor manera de evitar catástrofes económicas o conflictos familiares.
Para no ser parte de esa mayoría que nunca enfrenta el problema hasta que la crisis es inmanejable, éstos son algunos consejos para prepararse:

Hable con su familia

El primer paso en la planificación del cuidado a largo plazo de sus padres mayores es una discusión abierta y franca con la familia sobre dónde están los activos financieros de sus padres. Poner en orden los asuntos es tan simple como compartir información sobre documentos legales, cuentas bancarias, ahorros e inversiones y contactos profesionales que pueden ayudar a la familia a obtener acceso al legado financiero de sus padres.

Hable con un asesor geriátrico

Ya sea un médico como un profesional a cargo de una empresa de servicios para adultos mayores, hablar con un asesor ahora lo ayudará a comprender el tipo de situaciones que deberá enfrentar cuando sus padres lo necesiten. Infórmese de las alternativas y en lo posible de los costos, así ahorrará energía para cuando tenga que tomar las decisiones.

Hable con su contador o asesor financiero

La mayoría de las estrategias de inversión cambiarán después de la jubilación. Un asesor financiero es un profesional clave que lo ayudará a comprender los vehículos de inversión para generar ingresos de jubilación, así como aquellos que ayudarán a pagar la atención de personas mayores. Al tener una relación sana con su contador o asesor, evitará las tan frecuentes estafas para personas mayores.

Presupuesto para cuidados permanentes

Una vez que haya estimado cuáles son las fuentes posibles de ingresos y cuál es la cobertura de los servicios sociales, asesórese con una empresa de servicios de salud o acompañamiento de adultos mayores sobre los gastos que se pueden esperar por mes. Analice si puede cubrirlos o plantee al resto de la familia la necesidad de la colaboración.

Antes es mejor

Esta “conversación difícil“ no tiene por qué ser dolorosa. Al hacerlo un tiempo antes de que se necesiten los cuidados, se pueden evitar errores de planificación y tomar decisiones bien informados sobre la vida de personas mayores y la atención a largo plazo cuando llegue el momento. Haga que su familia y padres hablen y se relacionen con los profesionales que pueden hacer que esta transición a otro sistema de vida sea menos difícil y más positiva y segura.
Fuentes:
– A place for Mom
– Time.com

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