A medida que envejecen, casi el 90% de los adultos mayores prefiere seguir viviendo en su casa, aunque ya no puedan valerse del todo por sí mismos, o no puedan estar solos parte o todo el día.
Los motivos por los cuales prefieren vivir en su casa son fáciles de imaginar: quieren seguir teniendo la misma vida que antes y en el mismo lugar. Sin embargo, hay otras razones a tener en cuenta.

POR QUÉ LOS ADULTOS MAYORES SE RESISTEN A DEJAR SU HOGAR:

Si aún eres joven, tal vez no se te ha ocurrido que los adultos mayores tienen razones diferentes a las tuyas para preferir vivir en su casa, por ejemplo:
– A medida que se envejece las personas nos volvemos más resistentes a los cambios. Tal vez sea porque nuestro cerebro ya no puede adaptarse a nuevas situaciones e inconscientemente tomamos esa actitud.
– Les preocupa el futuro. Los jóvenes suelen sentir que zambullirse en lo desconocido puede ser desafiante, pero los adultos, especialmente cuando son mayores experimentan miedo hacia lo que no conocen, como el funcionamiento de una residencia.
– También temen perder su independencia o su dignidad ante la perspectiva que personas desconocidas, como cuidadores, deban higienizarlos o vestirlos.
– Estos sentimientos llevan habitualmente al adulto mayor a experimentar mucha angustia, por lo cual tal vez sea buena idea tomar algunas medidas para que pueda seguir viviendo en su hogar sin correr riesgos.
 
1 – ELIMINE LOS OBSTÁCULOS DE LA CASA:
Una buena forma de comenzar es adaptar el hogar para la nueva etapa. Tenga en cuenta que, si hay escaleras para el baño o el dormitorio, se hará muy complicado para el adulto subir y bajar varias veces al día. Convierta una habitación en planta baja en un acogedor dormitorio e instale un baño en el mismo nivel. Coloque alfombras antideslizantes para evitar las caídas, levante la altura del inodoro (especialmente si tiene problemas de cadera), coloque una silla para bañarse y una asidera en la pared del baño para que pueda incorporarse sin esfuerzo.
2- HABLE CON EL RESTO DE LA FAMILIA:
No pretenda tomar el trabajo de acompañar a su ser querido usted solo. Lo único que conseguirá es agotarse o alterar al adulto mayor. Hable con el resto de la familia para que haya un consenso acerca de cómo enfrentarán esta etapa. Especifique cronogramas para que todos puedan seguir cumpliendo con sus obligaciones diarias. Tenga especial cuidado en que el adulto mayor esté acompañado a la hora de las comidas.
3- VISITE LA ORTOPEDIA
Hay muchos productos ortopédicos que pueden hacer más fácil la vida de un adulto mayor. Sugiera ir juntos a una ortopedia para ver bastones, audífonos, bandejas adaptables a la cama, silla de ruedas, etc.
4- CONTROLE LAS MEDICINAS
Uno de los aspectos que no se puede descuidar es que el adulto mayor tome sus medicinas y lo haga en el momento debido. Puede llevar un cuaderno con las indicaciones de cada una o comprar los recipientes plásticos con compartimentos numerados para colocar las pastillas del día. Verifique con tiempo que haya stock de medicamentos para poder ir a la farmacia o pedirle la receta al médico antes que se acaben.
5- APROVECHE LA TECNOLOGÍA
Si el adulto mayor vivirá solo o tendrá compañía sólo por unas horas es muy buena idea asegurarse que tenga un teléfono móvil siempre a mano, o el teléfono fijo al lado de su cama. Grabe los números de los familiares o del servicio de emergencia en las primeras posiciones para que le sea fácil marcarlos. También puede instalar un sistema de alarma con monitoreo permanente o con botón de emergencias. Otra medida es instalar cámaras inalámbricas en los puntos principales de la casa de modo que usted pueda chequear en cualquier momento (desde su móvil o computadora) si el adulto mayor necesita ayuda. Además, utilice las aplicaciones de su teléfono para realizar trámites que le ocuparían más tiempo, como el pedido del supermercado, el pago de los servicios o la consulta del estado bancario.
6- INCENTIVE LA SOCIALIZACIÓN
Es importante que el adulto mayor siga frecuentando sus amigos o lugares de paseo. Si la movilidad es un problema, pídales a sus amigos que lo visiten o invítelos un día a la semana para un juego de naipes o para tomar el té. El deterioro mental y físico puede retardarse cuando el adulto se mantiene ocupado compartiendo tiempo con sus seres queridos.
7- CONSIDERE EL TRASLADO A SU CASA
Si no le es posible afrontar los gastos o los inconvenientes de que el adulto mayor permanezca en su casa, considere trasladarlo a la suya. Tenga en cuenta que es un paso importante que debe consultar con el resto de la familia: esta etapa puede durar años y puede hacerse muy difícil la convivencia. En caso de decidirse por esta opción, asegúrese que el adulto pueda conservar parte de sus pertenencias, como su juego de dormitorio, que tenga intimidad suficiente y que se sienta cómodo como en su propia casa. Esto disminuirá los posibles roces.
8 – CONTRATE ENFERMERÍA A DOMICILIO
Si la familia no puede cubrir las horas suficientes de acompañamiento diario, no viven cerca o trabajan tiempo completo, la mejor solución es contratar una empresa de enfermería a domicilio. Estas empresas cuentan con profesionales capacitados para atender de la mejor manera a su ser querido, se ocupan de solicitar los turnos médicos para consulta o estudios especializados, de preparar las comidas solicitadas por el nutricionista y, sobre todo, de que el adulto mayor se sienta siempre cuidado y bien acompañado. Este es un paso que seguramente impactará para bien en la salud de toda la familia y en las relaciones interpersonales.
Referencias:

  • Pabian and Russell, LLC
  • Livestrong.com
  • The Diary of an Alzheimer’s caregiver

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